Cada piso tiene una gran terraza con vistas circulares a lo mejor de Calpe: la playa del Arenal, la playa de la Fossa, la laguna de las Salinas y, por supuesto, el Peñón de Ifach.
Cada mañana, cada día... Una vida integrada en el cielo de Calpe...
Lo único que le separa de la laguna es un terreno destinado a uso escolar.
Las amplias zonas comunes cuentan con piscina, tenis de mesa, gimnasio y zona de juegos para niños.
Y su excepcional estética brilla desde el eje, el tronco y las baldosas de cerámica en blanco y oro, que recuerdan al mármol. De ellas brotan terrazas como hojas, esmaltadas en un llamativo oro luminoso y audaz.